Defensa contra actos de autoridad.

¿Qué hacer ante una demanda de un empleado? | Guía completa para PYMES en México

Enfrentar una demanda laboral por parte de un empleado puede ser una de las situaciones más estresantes y complejas para los empresarios, especialmente para las pequeñas y medianas empresas (PYMES). Cuando un empleado decide demandar a su empresa, tanto las implicaciones emocionales como económicas pueden ser significativas. En este artículo, vamos a desglosar el proceso que implica una demanda laboral en México, desde los primeros pasos que debes tomar, hasta cómo evitar llegar a una situación de este tipo. Además, te daremos consejos prácticos sobre cómo proteger tu empresa y evitar problemas futuros.

1. Primeros pasos: Mantén la calma y comprende el proceso legal

El primer paso fundamental al recibir una demanda laboral es mantener la calma y actuar de manera organizada. La Ley Federal del Trabajo establece un marco regulatorio muy claro sobre cómo se deben manejar las demandas laborales en México, lo que te permitirá tener un panorama más definido de las etapas a seguir.

Cuando recibes una demanda, el empleado tiene hasta un año después de finalizar la relación laboral para presentar dicha demanda. En este tiempo, es importante estar preparado y contar con toda la documentación en orden. Entre los documentos más importantes están:

  • Contratos de trabajo firmados por ambas partes.
  • Recibos de nómina.
  • Registro de horas extras (si las hubo).
  • Documentación de cualquier incidente o amonestación.
  • Comprobantes de pago de prestaciones (aguinaldo, vacaciones, primas).

La documentación adecuada no solo será útil en caso de que enfrentes un juicio, sino que también puede ser clave en etapas tempranas del proceso, como la conciliación, donde tendrás la oportunidad de resolver el conflicto antes de que escale a un juicio formal.

Es importante recordar que el proceso legal está dividido en varias fases: conciliación, contestación de la demanda, y juicio, siendo la primera la más crítica para intentar llegar a un acuerdo favorable para ambas partes.

2. Conciliación: Evitar el juicio es clave para tu empresa

En México, antes de que un caso laboral pase a juicio, debe pasar por una etapa de conciliación obligatoria. Esta etapa tiene como objetivo reunir a ambas partes (empleador y empleado) para llegar a un acuerdo sin necesidad de iniciar un juicio largo y costoso. La conciliación es mediada por un conciliador designado por el Centro de Conciliación y Registro Laboral, quien trata de acercar a las partes a un acuerdo.

En esta etapa, es fundamental que acudas acompañado de un abogado especializado en derecho laboral. No solo te ayudará a negociar, sino que también evitará que te enfrentes a situaciones desconocidas sin la asesoría adecuada. Como menciona la experiencia personal compartida, “llegar a un acuerdo en la conciliación puede ahorrarte tiempo, dinero y estrés”. Muchos empresarios han evitado largas disputas legales simplemente tomando una decisión inteligente en este punto.

Durante la conciliación, el empleado puede estar reclamando conceptos como:

  • Salarios caídos.
  • Horas extras no pagadas.
  • Despido injustificado.

Si el empleado cuenta con pruebas sólidas, es posible que sus demandas aumenten y el costo para la empresa sea considerable. Sin embargo, si llegas a un acuerdo durante la conciliación, podrías evitar estos costos, y lo más importante, proteger la reputación de tu empresa.

Es esencial tener en cuenta que en esta etapa no solo se discuten los aspectos legales, sino también las relaciones interpersonales que muchas veces complican las demandas. En muchas PYMES, el ambiente de trabajo puede ser más familiar y cercano, lo que añade un componente emocional que debe manejarse con cuidado. A veces, un empleado se siente herido por un despido, y esto puede influir en su decisión de demandar, incluso si no tiene razones legales fuertes.

3. ¿Qué pasa si no se llega a un acuerdo en la conciliación?

Si la conciliación no da resultado y no se llega a un acuerdo, el empleado recibirá una constancia de no conciliación. Esto permite que el empleado continúe con el proceso formal de la demanda laboral ante los tribunales. Aquí es donde comienza una nueva etapa: la demanda laboral formal.

Es crucial entender que el hecho de no haber conciliado no significa necesariamente que vas a perder el caso. Muchos empresarios sienten una gran presión en esta etapa, pero aún hay oportunidades para defenderte y, en algunos casos, para llegar a un acuerdo durante el proceso judicial.

4. Contestación de la demanda: Preparación es clave

Una vez que la demanda ha sido presentada formalmente, tienes 15 días hábiles para presentar tu contestación. Esta es tu oportunidad para demostrar que has cumplido con tus obligaciones laborales y que, si hubo un despido, este fue justificado. La respuesta a la demanda debe incluir todos los documentos y pruebas que apoyen tu caso.

Entre las pruebas más comunes que puedes presentar están:

  • Contrato de trabajo: Es vital que el contrato esté firmado por ambas partes y que incluya todos los términos acordados, como salario, horarios y funciones.
  • Recibos de nómina: Estos documentos demostrarán que has pagado al empleado de manera correcta y puntual.
  • Registros de asistencia y horas extras: Si el empleado está reclamando horas extras, es crucial que cuentes con registros precisos que demuestren cuántas horas trabajó realmente.
  • Documentación de despido: Si el despido fue por causas justificadas, como faltas graves, es necesario que tengas pruebas de los hechos (cartas de amonestación, informes de supervisores, etc.).

En esta etapa, el papel de tu abogado es fundamental. La redacción y presentación de la contestación debe estar alineada con los requerimientos legales, y cualquier error o falta de pruebas puede jugar en tu contra. Además, ten en cuenta que el trabajador tendrá 8 días para objetar cualquier prueba que presentes.

5. Juicio laboral: Cuando no hay vuelta atrás

Si la conciliación no tuvo éxito y el proceso judicial continúa, llega el momento del juicio laboral. El juicio puede prolongarse durante varios meses, dependiendo de la carga de trabajo de los tribunales, y durante este tiempo, tanto tú como tu empresa deberán estar preparados para presentar más pruebas y alegatos

Un aspecto importante que muchos empresarios desconocen es que durante todo el proceso de juicio aún se puede llegar a un acuerdo. En cualquier etapa del proceso, incluso durante la audiencia preliminar o el juicio en sí, las partes pueden conciliar y resolver el conflicto sin llegar a una sentencia final. Esto es importante porque, como he visto en casos previos, a veces el empleado inicia el proceso confiado en que ganará, pero al ver que su caso no es tan sólido, está dispuesto a negociar.

Durante el juicio, el juez evaluará las pruebas presentadas por ambas partes y decidirá qué pruebas son válidas y cuáles no. Esta es la razón por la cual la documentación laboral bien organizada puede ser tu mejor defensa. Un expediente laboral completo no solo aumenta tus posibilidades de ganar, sino que también puede ayudar a evitar un juicio costoso y prolongado.

6. Consecuencias de perder el juicio: Lo que debes saber

Si pierdes el juicio, las consecuencias pueden ser considerables. Dependiendo de las reclamaciones del empleado, podrías tener que pagar:

  • Indemnizaciones.
  • Salarios caídos.
  • Prestaciones no pagadas.
  • Horas extras o vacaciones pendientes.

Además, tu empresa podría sufrir daños en su reputación, lo cual es especialmente problemático para PYMES que dependen en gran medida de relaciones cercanas con sus empleados y su comunidad.

7. Prevención: La mejor estrategia para evitar demandas

Finalmente, la mejor manera de proteger tu empresa de una demanda laboral es prevenir que ocurra en primer lugar. Aquí te damos algunos consejos clave para evitar conflictos laborales y minimizar las probabilidades de enfrentar una demanda:

  • Documentación en regla: Asegúrate de que todos los empleados tengan contratos actualizados, firmados y que cumplan con la Ley Federal del Trabajo.
  • Pago puntual de prestaciones: No te atrases en el pago de aguinaldos, vacaciones y otras prestaciones obligatorias.
  • Registra las horas extras: Mantén un registro claro y preciso de las horas trabajadas, especialmente si los empleados trabajan horas adicionales.
  • Gestión de despidos: Si debes despedir a un empleado, asegúrate de hacerlo conforme a la ley. Recuerda que el despido injustificado es una de las principales causas de demandas laborales.

Es importante destacar que, en muchas ocasiones, las demandas laborales pueden evitarse si existe una buena comunicación entre el empleador y el empleado. Si te enfrentas a un conflicto laboral, trata de resolverlo de manera amistosa antes de que escale a un proceso legal.

¿Necesitas asesoria legal para tu PYME?

Typ Mi Negocio es parte de Plataforma Livez